San Sebastian recupera el clásico i ladri de biciclette

El festival donostiarra siempre trae buenos momentos para los amantes del cine italiano. En la edición 68 que se inicia mañana viernes 21 de septiembre el certamen recupera el clásico Ladri di Biciclette de Vittorio de Sica. La película que conquistó el Óscar a la mejor película de habla no inglesa en 1949 y paradigma del neorrealismo italiano se proyectará en la sala de cine Tabakalera el lunes 24 de septiembre. La restauración ha sido realizada por el laboratorio L’imagine Ritrovata de la Fundación Cineteca de Bolonia. Previamente se pudo ver en la sección Cannes Classics del pasado Festival de Cannes y en el festival Il Cinema Ritrovato de Bologna, dentro de la sección Ritrovati e Restaurati 2018.

No será la única sorpresa italiana del festival de San Sebastián. Dentro del VII foro de Coproducción Europa-América Latina destinado a fomentar la colaboración entre profesionales se presentará el proyecto de coproducción de Stefano Pasetto, El Velo.

14 de septiembre: Una casa, una familia y un milagro, una comedia para el fin del verano

Tras cinco años de coma aparentemente irreversible del patriarca de una familia Sergio, cuatro hermanos Alex, Orestes, Jacinto y Fanny deciden vender la villa familiar del campo y deshacerse de todo su contenido. Pero de repente sucede el milagro y el padre Sergio se despierta por sorpresa. Los médicos son muy claros. Para la recuperación debe volver a su vida anterior y recuperar su vida rodeado de sus 4 hijos. 

El actor Augusto Fornari se pasa a la dirección con esta comedia de enredo familiar Una casa di famiglia. La historia no es novedosa y situaciones similares ya las vivimos en la aclamada Goodbye Lenin por lo que uno tiene una sensación de dejà vu. 

Fornari trata de sacar partido a los afectos y rivalidades de unos hermanos tan dispares como el mujeriego Alex, Orestes, un músico que tiene que trabajar con adolescentes sin talento, la separada Fanny y Jacinto un hombre de negocios que casi nunca sonríe, y al final uno se acaba encariñando de estos personajes.  Fornari consigue su propósito una comedia ligera para una tarde de finales de verano.