5 dia del FICM: las visiones de la familia de Mimmo Verdesca y Paolo Costella

En el 5 día del festival de Cine Italiano de Madrid dos visiones sobre la familia y la maternidad fueron las protagonistas con las proyecciones de Per il mio bene de Mimmo Verdesca y Storia di una notte de Paolo Costella. Verdesca, es conocido por su trabajo como documentalista para recordar a actrices de cine italiano como Lilia Silvi o Alida Valli  o a estrellas infantiles. Tal como manifestó al público del cine Palacio de la Prensa siempre ha estado fascinado por las relaciones humanas y más concretamente en las relaciones dentro de una familia, tema seleccionado para su primera cinta de ficción Per il mio bene. Nos cuenta la historia de Giovanna, directora de la empresa familiar Zanon y que cría a su hija adolescente sola. Su vida fluye con normalidad, hasta que descubre que padece un cáncer de hígado y que necesita urgentemente un donante. No es posible porque nunca le habían confesado la verdad que fue adoptada con un mes. Aunque tras muchas dificultades logran dar con su madre biológica, ella sigue negándose a ver a Giovanna, quien decide entonces ir en su búsqueda, convencida de que logrará hacerla cambiar de opinión. Pero el encuentro con esta mujer misteriosa y hostil sacará a la luz verdades desgarradoras. Verdasco propone un viaje interior en el que reflexiona sobre la identidad y la necesidad de conocer los orígenes. A través de la convergencia de dos realidades madre e hija (adoptivas y biológicas), cada personaje se convierte en un espejo del otro y el puente natural entre pasado, presente y futuro. No hay que dejarse llevar por las apariencias y siempre hay un motivo detrás de cada decisión. 

Por su parte, Storia di una notte reafirma a Paolo Costella como uno de los nombres a seguir de la cinematografía italiana. Conocido por ser guionista de Paolo Genovese en filmes como Perfetti sconosciuti, La primera notte de la mia vita, Superoi o Follemente que clausurará precisamente la 18 edición del festival. Costella reflexiona sobre las consecuencias de la pérdida de un hijo en una familia, posiblemente uno de los dolores más grandes que se pueden experimentar. En la presentación del filme indicó que su pretensión había sido huir de la retórica pero no de una historia tan trágica. Muy bien realizada, jugando con los paisajes y logrando crear la tensión necesaria da la oportunidad de descubrir a Anna Foglietta en un rol totalmente diferente al que nos tiene acostumbrados.